Existen muchas formas de menstruar. Hoy en día, que atravesamos un proceso importante de visibilización de la menstruación, encontramos en la red cientos de recomendaciones para el cuidado menstrual y para convertir esos días en una experiencia placentera. Y así como hay sistemas de salud en el mundo, cosmovisiones, medicinas, climas, alimentos y mujeres, habrá también formas de menstruar en salud y consciencia.
Hoy les comparto lo que ha funcionado para mí y para las mujeres con las que trabajo, producto de mi experiencia personal, de investigaciones realizadas de manera independiente, y de mi camino como mujer.
LAMENTE
Nuestro cerebro menstrúa con nosotras. Anda lento y el pensamiento racional disminuye para dar paso al pensamiento intuitivo. No es de extrañarse que en estos días no podamos fijar la mente en el trabajo u otros procesos racionales y que aquellas tareas que requieren procedimientos mentales complejos se nos den con mayor dificultad. Es importante entender esto porque una vez lo hemos hecho, podemos asignar mejor las tareas que nos ponemos en los días de menstruación, y con ello nos hacemos la vida más fácil y nos evitamos molestias innecesarias. Si podemos pasar del trabajo y estar en casa directamente, al menos el día más fuerte del sangrado, pues tanto mejor.
LAS EMOCIONES
Placentera |
LA SANGRE
La sangre menstrual es un indicador de salud. Es la manifestación física de nuestro mundo interior. Es nuestro sistema incorporado de purga y limpieza. Es un fluido vital, y antiguamente (muy antiguamente) considerado sagrado. Aprender a ver nuestra sangre es aprender a vernos a nosotras mismas. Una sangre saludable es roja y brillante, con pocos coágulos. Ni muy escasa ni muy abundante. Es una sangre que sale sin dolor y cuyo olor debe ser simplemente ferroso.
Para recogerla lo más recomendable es usar la copa lunar. La copa no sólo nos permite entrar en contacto con nuestra sangre en su estado natural (antes de entrar en proceso de oxidación) sino que nos ayuda a recogerla para su siembra, para pintar, para abonar nuestras plantas, o para cualquier otro uso ritual o medicinal que queramos darle.
EL CUERPO
En el apartado sobre menstruaciones abundantes había hablado ya sobre los cuidados físicos que requerimos durante el proceso menstrual. Estas consideraciones se derivan del trabajo de muchas personas en torno a la medicina tradicional ancestral de los pueblos indígenas de Colombia, así como de algunas investigaciones y procesos medicinales que he atravesado de manera personal en mi búsqueda de sanación. Estos cuidados nos ayudan a mantener no sólo la regularidad y salud de nuestro ciclo mensual, sino que pueden prevenir el desarrollo de enfermedades posteriores, desde la formación de quistes hasta la osteoporosis.
Aquí se las comparto nuevamente:
Paula Araya |
En ese momento el cuerpo es -como en ningún otro- vulnerable al frío. Frío que puede entrar por el suelo (al caminar descalzas) a través del agua (cuando nos bañamos en la ducha, nos mojamos la cabeza, los pies, etc) a través del aire (corrientes de viento especialmente en la espalda, vientre y cabeza), o a través de la alimentación, tema que trataremos a continuación más extensamente. En cuanto a la temperatura queda entonces decir que lo más recomendable es por tanto abstenerse de bañarse durante los 3 primeros días de la luna, o los dos más fuertes, y hacerse únicamente un baño con paños tibios en donde sea necesario (o baño de gato que llaman por mis tierras). Especialmente contraindicado lavarse el pelo y más aún salir a la calle con el pelo mojado.
EJERCICIO
La etapa menstrual es una etapa de descanso. La energía deja de fluir hacia afuera y nos volvemos más introspectivas. Estamos somnolientas, bajas en hierro, y no nos favorece la actividad física extenuante. Ejercicios de respiración, algunas posturas de yoga suaves y movimientos circulares con la pelvis para calentar el útero son más que suficientes. Nada de ejercicio cardiovascular intenso y en lo posible nada que implique salir de casa.
ALIMENTACIÓN
La alimentación debe ser frugal e incluir ante todo cereales integrales como trigo y arroz. A continuación una lista de aquellas cosas que debemos evitar:
* Alimentos que enfrían la matriz:
- Bebidas con hielo o alimentos directamente sacados de la nevera
- Verduras y frutas, en especial cítricas
- Cerveza
* Alimentos que aumentan el sangrado:
- Frutas ácidas
- Verduras
- Avena
- Cebada
* Alimentos irritantes que provocan un olor fuerte:
- Grasas
- Yuca
- Papa
- Lácteos
- Cerdo
- Maíz
- Tallos
OTROS CUIDADOS
Reducir el consumo de sal para evitar retención de líquidos.
Evitar cafeína y otras bebidas estimulantes que puedan reducir la absorción de hierro.
Descansar
Mantener el vientre y la espalda baja siempre calientes.
* Infusiones recomendadas
- Canela
- Manzanilla dulce
- Ruda
- Geranio aromático
- Limonaria
- Gengibre
Personalmente he notado que unas infusiones suaves de ruda un par de días antes de la fecha esperada permiten unas contracciones uterinas casi imperceptibles. Si haces esto, ten presente que el sangrado puede ser más abundante que de costumbre los primeros días, pero también es posible que el periodo sea más corto.
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EL REPOSO Y LA INTROSPECCIÓN
Linda Lou |
Sea que decidas comer frutas o no, bañarte o no, hacer ejercicio o no, pienso que una menstruación bien vivida es aquella en la que nos damos el tiempo de mirarnos tranquilamente, de observar nuestros procesos. Algunas mujeres encuentran que hacer caminatas suaves les ayuda a disminuir el malestar de los cólicos mientras otras (como yo por ejemplo) prefieren estar simplemente acostadas durante la mayor cantidad de tiempo posible. Este conocimiento de nuestro cuerpo se desprende de la capacidad de mirarnos a nosotras mismas de manera honesta y amorosa, y eso es mucho más importante que cualquier cosa que nos pueda sugerir un blog o un libro. La menstruación es un momento de introspección, de observación pausada, de meditación sobre el propio cuerpo. Es un momento único para entrar en contacto con nuestro mundo interior, con aquello que estamos listas para liberar, y con aquello que deseamos sembrar en el ciclo que comienza. Cuando siembres tu sangre siémbrala para limpiar lo viejo y para fundamentar lo nuevo. Descansa en la tranquilidad que el cuerpo te pide y en el silencio aprende a verte profundamente. Cuando te veas en el espejo de tu sangre, aprenderás a amarte hondamente a ti misma.
Como regalito de esta entrada, el link al álbum de dibujos menstruales para que se animen y compartan, y el link del libro de poesía menstrual para que se inspiren y empiecen sus propios proyectos menstruales ;)
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