miércoles, 13 de enero de 2010

Llamado de la Montaña 2010

Recientemente regresé del tercer encuentro de ecoaldeas y comunidades alternativas Llamado de la Montaña 2010, y tengo que decir que vengo realmente emocionada, conmovida y llena de energía. Es fabuloso saber que hay tanto movimiento en el país en torno al tema de la permacultura, la bioconstrucción, el comercio justo, las economías solidarias, los círculos de hombres y mujeres, la agricultura urbana... Es reconfortante ver cuanta gente se ha sumado a este tipo de iniciativas y la cantidad de proyectos que surgen cada vez con más fuerza alrededor del mundo.

Aparte de eso, claro, está lo bonito del encuentro en sí mismo. La posibilidad de compartir con gente de tantos lugares y con tantas y tantas ideas que no alcanza el tiempo para escucharlos a todos y asimilar a fondo todo lo que uno quisiera. El compartir de los quehaceres de la finca, las comidas, las charlas, los talleres, las "noches mágicas" cantando y danzando con hermanos de todas partes, unidos en un solo esfuerzo por cambiar el rumbo de esta sociedad desquiciada y darle un respiro a la tierra.

Se me escapan las palabras para describir lo satisfecha que me siento de haber tenido esta oportunidad. Por eso, sin más vueltas, invito a todos los que visiten este blog a adentrarse un poco en ese mundo maravilloso. A investigar, a aprender, y a proponer soluciones donde quiera que estén. ¡No importa si no podemos comprar un lote e irnos a vivir al campo! El mundo que espera el cambio está ahí a la vuelta de la esquina, en nuestra propia casa, en nuestros conjuntos y edificios, entre nuestras familias y amigos. El conocimiento y las experiencias ya están ahí esperando que más y más personas salgan a la búsqueda...

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